sábado, 31 de octubre de 2009

Ojeada

Está asomada a la ventana, y espera las brisas fluctuantes de la tarde para cerrar los ojos y sentir que aquel viento arrastra consigo sus dolencias. Hace semanas que dedica media hora de su día a limpiar su cara con aire, casi puede decirse que se ha convertido en una rutina sin fin. Mientras mantiene los ojos cerrados y aguanta el dolor de cabeza, analiza su situación: aún insiste en pensar a fondo aquel dilema. Casi como un mecanismo de supervivencia, se autoconvence de que, a pesar de que hay lugares en donde la ciencia no llega, la sabiduría popular puede tranquilamente remplazarla. Al fin y al cabo, no todo debe ser necesariamente racional y verificable. Quizás ese viento en la cara, tal vez sus pensamientos inocentes o simplemente su escepticismo por la perfección de la ciencias médicas, puedan ayudarla. Después de todo, siempre se está a tiempo de acudir a la cura por sugestión. Eso sí, le produce temor pensar que todo el proceso pueda darse sin el dominio de su conciencia plena y siente el impulso de volver a lo seguro.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Percepción extrasensorial

Últimamente tiene la sensación de que el sentido de la vista se le ha modificado. Aunque le parezca descabellado, está empezando a convencerse de que no es sólo una idea que inventó por hastío. Hace un tiempo que, no sólo percibe sensaciones luminosas y capta el color, tamaño y forma de los objetos y personas, sino que además puede ver lo que hay dentro de ellos. La realidad es que le aterra un poco esta nueva capacidad y espera pronto recuperar su limitación mortal. No sea cosa que de ahora en más, ya nada sea una incógnita a descubrir. Piensa mucho en el aburrimiento que implicaría perder ese desafío, pero por suerte se tranquiliza al recordar que jamás creyó en la parapsicología.

martes, 27 de octubre de 2009

Calesita

Está parada sobre la plataforma rotatoria, y sufre una sensación desagradable que le afecta la cabeza. Cuanto más intenso es el movimiento, más fuerte es el miedo a perder el equilibrio. Sabe que en realidad podría evitarlo, pero no se anima a saltar hacia el piso estable. Cada vez que está a punto de lograr un paso, casi como por inercia, se detiene bruscamente. Entonces, entiende que es mejor esperar el momento adecuado y no arriesgar su integridad a la deriva. Bien sabe que, mientras mantenga la coordinación intacta, podrá retirarse cuando le plazca. Sólo es ese primer momento, pasar casi sin darse cuenta, ese primer instante de exagerada racionalidad.

lunes, 26 de octubre de 2009

Pesadilla

Siente al monstruo sentado sobre su pecho, y la opresión que ejerce con el peso, le dificulta la respiración. Como cualquier trastorno del sueño, le causa una terrible sensación de angustia. Aún así, está segura que pronto sus movimiento corporales actuarán como defensa, provocando su despertar.
Ya en estado de vigilia, prefiere retrotraerse al siglo pasado y pensar que simplemente tiene problemas digestivos.

sábado, 24 de octubre de 2009

X = ?

Se despertó y fue directamente al diccionario: una ecuación es una igualdad entre dos expresiones algebraicas denominadas miembros, en las que aparecen valores conocidos y desconocidos.
Con esa definición en la cabeza intentó, durante días, resolver matemáticamente todos sus problemas metafísicos. Por suerte, y lejos de haberse encontrado con la frustración, llegó finalmente a una aliviante conclusión: muchas de sus ecuaciones pueden tener infinitos valores que la satisfagan.

martes, 20 de octubre de 2009

Eco

Hace un tiempo que sueña que se queda muda. La pesadilla ilustra a su señal acústica original, extinguiéndose en la distancia. A pesar de que insiste en que le devuelvan la voz aunque tan sólo sea en forma reflejada, la respuesta tarda en aparecer. Cuando se han acumulado las ondas, preparadas para producir el sonido tan esperado, se interrumpe abruptamente el proceso.
Una vez conciente de su despertar, no puede dejar de sentir ese gusto a libertad que entra en escena al comenzar a gritar.

sábado, 17 de octubre de 2009

Relaciones infinitas

Jamás dudó de los privilegios del lector. Tan segura estuvo siempre, que por momentos se sintió más protagonista que los propios personajes. Pensar en cuántos sufrimientos y felicidades compartió con aquellos que ahora reposan en la tranquilidad de los estantes, le produce un poderoso escalofrío que le eriza la piel.
Algunas vez leyó en esas páginas teóricas sobre la relación dialéctica entre el libro y su lector. Ahora comprende la resignificación que aquello implica y le da absoluta satisfacción. Frente al aparente final de cada ciclo, se enorgullece al comprender que la eternidad puede hacerse materia.

lunes, 12 de octubre de 2009

Fatalidad

Suspira con media sonrisa cada vez que se permite disfrutar de esos instantes laberínticos. Le entusiasma demasiado el desafío de plasmar esa huella ingenua.
Y sufre tal punto de agobio, que su demencia deviene en temor a la vil abstracción.

martes, 6 de octubre de 2009

Átomos elementales

En los momentos de mayor desatino y despropósito, seguramente caerá en la tentación de reclamar su desintegración molecular.
Pero, por favor, no seamos intolerantes. Por más obtusa que parezca, a ella en realidad le aterra la física cuántica.

sábado, 3 de octubre de 2009

madurar

No quiere poner en su debido punto con la meditación,ni una idea, ni un proyecto ni un designio. Pero aún así, hay cuestiones que escapan a sus posibilidades e irrumpen provocadoramente en los momentos más delicados. Entonces, para dejar su conciencia tranquila, no le queda otra que enfrentar ese ineludible paso que la llevará hacia esos lugares donde abunda todo, menos la seguridad.